El debate interminable entre usuarios de iPhone y Android ha tomado un nuevo giro. Esta vez, no se trata de especificaciones técnicas o funciones llamativas, sino de la seguridad en línea y el comportamiento de los usuarios. Según una nueva investigación de Malwarebytes, los usuarios de Android están demostrando ser más cautelosos y estar mejor protegidos en línea en comparación con los usuarios de iPhone.
Este análisis, que encuestó a 1,300 adultos en Estados Unidos, Reino Unido, Austria, Alemania y Suiza, resalta una brecha creciente en ciberseguridad, no por los dispositivos en sí, sino por la forma en que los usuarios interactúan con ellos.
Los usuarios de iPhone toman más riesgos en línea
Uno de los hallazgos más destacados: los usuarios de iPhone tienen más probabilidades de involucrarse en comportamientos riesgosos en línea. Casi la mitad (47%) admitió comprar en sitios web desconocidos solo porque ofrecían un mejor precio, en comparación con solo el 40% de los usuarios de Android. Además, el 41% de los usuarios de iPhone envió mensajes directos en redes sociales a vendedores para obtener descuentos, algo que solo hizo el 33% de los usuarios de Android.
Este tipo de interacción aumenta la probabilidad de caer en esquemas de phishing, promociones falsas o incluso enlaces maliciosos, que es justo en lo que confían los ciberdelincuentes.
Los hábitos de seguridad son más débiles en usuarios de iPhone
Los usuarios de iPhone también están rezagados en cuanto a las prácticas básicas de ciberseguridad:
- Solo el 21% usa software de seguridad en sus teléfonos (frente al 29% de los usuarios de Android).
- Solo el 35% utiliza contraseñas fuertes y únicas para sus cuentas en línea (frente al 41% de usuarios de Android).
Esta reticencia a adoptar herramientas o mejores prácticas de protección hace que los usuarios de iPhone sean más vulnerables a malware, estafas y violaciones de datos. Y las cifras lo confirman: el 53% de los usuarios de iPhone reportaron haber caído en una estafa, frente al 48% de usuarios de Android.
Una falsa sensación de seguridad
¿Por qué esta diferencia? Parte de la respuesta puede estar en la sobreconfianza. Malwarebytes encontró que el 55% de los usuarios de iPhone creen que las protecciones integradas en su dispositivo son suficientes para mantenerlos seguros. Esta confianza, aunque reconfortante, puede generar complacencia, dejando a los usuarios expuestos a amenazas avanzadas que pueden evadir las defensas predeterminadas.
Pero la ciberseguridad nunca es solo cuestión del dispositivo. Como lo señala Mark Beare, director general de consumidores de Malwarebytes:
“Los dispositivos y sistemas operativos son solo puertas de entrada a aplicaciones y sitios web, y son esos espacios en línea los que a menudo presentan riesgos cibernéticos.”
La nueva normalidad: prácticas de compra inseguras
El comercio electrónico moderno ha difuminado la línea entre comportamientos legítimos y riesgosos. Hoy en día, incluso las marcas reputadas incentivan a los usuarios a:
- Hacer clic en enlaces recibidos por mensajes o correos electrónicos.
- Escanear códigos QR para completar compras.
- Enviar mensajes por redes sociales para desbloquear ofertas.
Estos son exactamente los comportamientos contra los que los expertos en seguridad solían advertir. Y sin embargo, los usuarios de iPhone son los que más tienden a cumplirlos.
Por ejemplo, el 63% de los usuarios de iPhone han compartido su número telefónico para recibir cupones o promociones (frente al 55% de usuarios Android), y el 70% ha escaneado códigos QR para completar una compra. Aunque el escaneo de QR se normalizó durante la pandemia, acciones como enviar mensajes a vendedores desconocidos o compartir datos personales a cambio de pequeñas recompensas siguen siendo de alto riesgo.
Las herramientas de ciberseguridad están disponibles, pero poco usadas
Muchos usuarios de iPhone no aprovechan las protecciones existentes. Gestores de contraseñas, aplicaciones de seguridad e incluso la propia herramienta de contraseñas de Apple (introducida en iOS 18) están fácilmente accesibles, pero la adopción sigue siendo baja.
Incluso algo tan básico como usar un bloqueador de anuncios muestra disparidad: solo el 19% de usuarios de iPhone lo utilizan, en comparación con el 27% de usuarios Android.
Es importante destacar que estas no son limitaciones del sistema iOS, sino decisiones de los usuarios. Con el aumento de robo de datos y estafas de ingeniería social, estas decisiones tienen consecuencias reales.
La seguridad en línea es responsabilidad de todos
La conclusión principal del informe de Malwarebytes no es culpar a un grupo de usuarios sobre otro, sino fomentar la conciencia y la protección proactiva, sin importar el dispositivo.
Todo usuario debería:
- Usar contraseñas fuertes y únicas para cada cuenta en línea.
- Instalar software de seguridad confiable.
- Tener precaución al hacer clic en enlaces desconocidos o escanear códigos QR.
- Evitar compartir datos personales por pequeñas recompensas.
- Pedir ayuda cuando algo le parezca sospechoso en línea.
La ciberseguridad no se trata de elegir entre iOS o Android, sino de cómo nos relacionamos con el mundo digital. Confiar en el sistema no es suficiente. Es hora de tomar decisiones más inteligentes y seguras.